Hoy puedo gritar a los cuatro vientos que soy y me siento sumisa.
Y no es que no lo fuera o no lo sintiese antes, no, sólo que hoy he tenido una sensación diferente, una percepción distinta, una ansiedad que no había tenido antes, que no era percibida igual. Es como cuando tenemos la menstruación y las hormonas están dislocadas y una percibe las cosas de diferente modo, pues algo así me ha ocurrido hoy.
Ha sido una semana difícil, complicada a ratos, más de lágrimas que de risas, semana de afrontar cosas del pasado que estaban ahí escondidas, semana de sentimientos, de verdades. Pero también ha sido la semana del despertar, de abrir los ojos, de mirar más allá de la punta de mi nariz y darme cuenta de muchas cosas. Ha sido una semana decisiva, mucho, para mi y para mi Amo, porque lo que me ocurra a mi le afecta a él y viceversa, como debe de ser.
Y todo lo que ha pasado ha influido en mi sentir de sumisa, es como si hubiese recibido un empujón y he subido tres escalones de golpe. Y lo siento en todos los poros de mi piel, en cada célula que compone mi cerebro, donde se cobija mi pensamiento, en cada cavidad de mi apasionado y alboratado corazón donde reside mi sentir.
Hoy puedo decir, hoy puedo decirte que me siento sumisa, más sumisa que nunca, que cuando de mi boca salen las palabras...soy tuya...un escalofrío me recorre el cuerpo de arriba a abajo, una sensación excitante revolotea por mi estomago, un no se que, que no se yo... Un sentimiento de querer entregarme con los ojos cerrados a quien pertenezco, abandonarme en sus brazos y que haga de mi lo que desee. Sólo pensar en ti, en tu placer, en tu disfrute, en tu gozo sin necesidad de otra cosa, sin querer otra cosa nada más que a ti.
Estoy feliz, estoy contenta, alegre y orgullosa, estoy motivada y preparada para afrontar todo lo que venga y más, porque a tu lado mi Amo...hasta el infinito y más allá...
Te quiero Amo, te quiero Amor ♥ .
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